Investigaciones
Descubrimientos sobre probióticos y sus efectos en la salud.
En esta sección encontrarás un conjunto de artículos y reportes originales que abordan, desde un enfoque riguroso, las propiedades y mecanismos de acción de Bacillus subtilis DG101. Cada estudio detalla objetivos, metodologías y resultados experimentales que respaldan su uso en ámbitos como la modulación de la microbiota, la inmunidad, el metabolismo, la neuroprotección y la longevidad. Te invitamos a revisar cada informe para comprender en profundidad cómo esta cepa probiótica interviene en procesos fisiológicos clave y sienta las bases de nuevas aplicaciones terapéuticas.
Probióticos Esporulados
Los probióticos esporulados, como Bacillus subtilis DG101, permanecen inactivos en forma de espora y resisten condiciones extremas. Al llegar al intestino, se activan y benefician la salud, permitiendo su uso en alimentos sin necesidad de refrigeración ni pérdida de eficacia.
Microbiota
La microbiota es el conjunto de microorganismos que habitan en el cuerpo humano y cumplen funciones esenciales. Su equilibrio, conocido como eubiosis, fortalece el sistema inmunológico y mejora la salud general. Su alteración, en cambio, puede favorecer diversas enfermedades.
Embarazo y lactancia
Durante el embarazo y la lactancia, una microbiota materna equilibrada fortalece el sistema inmune del bebé y contribuye a su desarrollo epigenético. Cuidarla desde el embarazo hasta los dos años es clave para prevenir enfermedades y promover una salud duradera.
Infecciones bacterianas
Diversos estudios muestran que Bacillus subtilis DG101 inhibe bacterias patógenas como Vibrio cholerae y Candida, mejora la absorción de nutrientes y previene infecciones mediante exclusión competitiva, actuando como un potente probiótico con beneficios inmunológicos y digestivos comprobados científicamente.
Diabetes
Investigaciones clínicas sugieren que Bacillus subtilis DG101 puede mejorar el control de la glucosa en personas con diabetes tipo 2. Su acción sobre la microbiota intestinal favorece la respuesta a la insulina, ayudando a regular el azúcar en sangre de forma natural.
Celiaquía
La microbiota intestinal influye en la celiaquía, y los probióticos esporulados como Bacillus subtilis DG101 podrían mejorar la digestión y calidad de vida. Su resistencia y capacidad para degradar gliadina lo posicionan como un complemento prometedor al tratamiento sin gluten.
Psicobióticos
La microbiota intestinal influye en la salud mental al comunicarse con el sistema nervioso. Probióticos como Bacillus subtilis producen compuestos beneficiosos y, según estudios recientes, pueden proteger neuronas y reducir síntomas de enfermedades neurodegenerativas como Parkinson y Alzheimer en modelos animales.
Simbióticos
Los simbióticos combinan probióticos y prebióticos para potenciar la salud intestinal. Mientras los probióticos aportan bacterias beneficiosas, los prebióticos las nutren. Su acción conjunta favorece el equilibrio de la microbiota, siendo más efectiva que consumir prebióticos solos, especialmente en casos de disbiosis.
Sobrepeso y obesidad
Un estudio clínico mostró que Bacillus subtilis DG101, combinado con dieta saludable, ayudó a reducir peso, grasa corporal e IMC en personas con obesidad. También mejoró niveles de insulina y glucosa, mostrando potencial como apoyo en tratamientos contra la obesidad.
Bienestar intestinal
El bienestar intestinal influye en la digestión, el sistema inmune, el ánimo y el metabolismo. Mantener una microbiota equilibrada mediante una dieta rica en fibras, probióticos, hidratación y buenos hábitos es clave para prevenir enfermedades y promover la salud integral.
Infecciones fúngicas
Las infecciones fúngicas, como la candidiasis, surgen por el crecimiento excesivo de hongos presentes en el cuerpo. Factores como antibióticos o inmunosupresión favorecen su aparición. La prevención incluye higiene adecuada, alimentación equilibrada y atención médica ante síntomas persistentes.
Inmunidad contra COVID-19
Un estudio internacional demostró que Bacillus subtilis DG101 actúa como adyuvante en vacunas, generando inmunidad sistémica (IgG) y mucosal (IgA). Co-administrado con la vacuna contra COVID-19, fortaleció la respuesta inmune y la memoria, clave para prevenir reinfecciones y nuevas variantes.